JAVIERADA CON SORDINA

No pudo ser. Y es que nuestras ilusiones nunca pueden luchar -y mucho menos alzarse victoriosas- contra las previsiones inclementes del tiempo y los caprichos meteorológicos. Nos había sucedido ya en otras ocasiones, pero esta Javierada resultaba, sobre el papel, especialmente gratificante. Al cabo de dos años sin poder peregrinar hasta los pies de San Francisco Javier por la malhadada pandemia, había llegado la hora de celebrar nuestra XLIII Javierada por todo lo alto. Pero ya queda dicho: no pudo ser. El tiempo no perdona.

Amanecía el domingo 13 de marzo en la Comunidad de Madrid. Y, contra todas las previsiones, el cielo estaba azul, sin una sola nube. Habían fallado los pronósticos, sí. Pero ya no había remedio. Hasta última hora del viernes 11, y durante buena parte del sábado, los meteorológos avanzaban y se ratificaban en que nos esperaba un fin de semana pasado por agua. Pero fallaron. Hasta pocas hotras antes de la partida, el agua había continuado cayendo en algunos puntos de la Comunidad de Madrid. Pero había respetado a Nuevo Baztán. Aunque ya era tarde. Para entonces, la fiesta habìa dejado de ser tal.

Evidentemente, unas pocas horas antes eran ya demasiadas para dar marcha atrás. El Via Crucis, en esta Javierada de 2022, no podía desarrollarse por la carretera de Nuevo Baztán a Olmeda de las Fuentes, con salida y regreso en la parroquia neobaztanesa de San Francisco Javier. fieles, excursionistas y navarros tuvieron que limitarse a seguir, con fe y recogimiento, este Via Crucis en el interior del templo. El rezo estuvo dirigido por dosé- Congregantes de San Fermín de los Navarros: Begoña Rotaeta Otegui y Joaquín Jimenez Michel. Una nutrida
reresentaciòn de los peregrinos navarros, presentes ya a esas horas en Nuevo Baztán, siguió tan piadosa y acostumbrada devoción, en el interior de la iglesia.

A continuación, y en el mismo escenario parroquial, tuvo lugar una misa en honor del co-Patrono de Navarra y Universal de las Misiones católicas, San Francisco Javier, el más trascendental santo que haya dado Navarra a la Iglesia. Presidió la Eucaristía el P. José María Calderón, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias, quien trazó un perspectiva de la participación española -sacerdotes, miembros profesos de órdenes religiosas, monjas y seglares- en misiones esparcidas por el mundo. Misiones en las que se trabaja con muy escasos recursos que nuestros misioneros compensan con una entrega entusiasta. Una labor muy meritoria, alejados de los suyos, familia y amigos, en un número que en estos momentos totalizan la considerable cifra de 10.000 misioneros trabajando en numerosísimos países del mundo entero; auténtica “infantería de la Iglesia” como se les ha calificado, entre los que ocupan un puesto de honor los 600 navarros que dedican sus vidas a seguir los pasos de Javier.

Terminada la ceremonia, se pudo constatar que el escenario sobre el que se había programado la comida de hermandad -la Campa- estaba absolutamente impracticable, debidio a casi un palmo de barro acumulado a consecuencia de las lluvias caídas durante la semana anterior al evento. Por ello, quienes buenamente lograron encontar mesa, se quedaron a comer en la Plaza de la Iglesia, en la que se asientan tanto el Palacio de Goyeneche como la parroquia anexa al mismo, integrada en el complejo arquitectónico, obra de José Benito de Churriguera.

Esta edición de la Javierada de Navarros a Nuevo Batán ha patentizado, ya desde los programas digitales distribuidos de antemano, que los organizadores -la Real Congregación- habían tomado la decisión de que esta Javierada fuese, de todas maneras, diferente. Mientras cientos de españoles seguían falleciendo en domicilios y hospitales, en medio del silencio y la indiferencia generales -con la excepción obvia de familiares y amigos, con los que nos solidarizamos- no era cuestión de celefrar una fiesta en pleno sentido de la misma, con charangas, poasacalles, jotas y joteros, y la gran verbena final. De ahì la razón de que se hubieran restringido los actos de esta XLIII Javierada a los aspectos puramente religiosos, dejando para mejor ocasión la reanudación de nuestras javieradasa en toda su plenitud. Para ese día, navarros y madrileños están invitados a protagonizar la Javierada del reencuentro, en su ediciòn de 2023 . Que San Francisco Javier y San Fermín nos ayuden a todos.. Que así sea.